Siempre se dice que la política es sin llorar, que ahí todo vale y quien entra en ese mundo sabe a lo que se enfrenta, por lo que debe estar dispuesto a jugar en aquella ruleta. Y claro, quienes se lamentan después no son los políticos, sino muchos ciudadanos que votamos por ellos, de un lado y otro.
Es año de elecciones, y en tiempos de campaña, los políticos muestran su peor cara. Basta ver a los partidos enfrascados en peleas internas por candidaturas para las próximas elecciones o entrevistas en las que se sacan los ojos, sin mencionar sesiones parlamentarias o concejos municipales en donde nuestras autoridades discuten como perros y gatos, llenos de odiosidades y perdiendo todo pudor.
Se exige cumplir normas y leyes, y la más básica de todas, el respeto entre personas, ¿en política no? Bien valdría la pena recordar a todos quienes este año se disputan un cupo en la papeleta, que el voto obligatorio puede dar con la única chance de su ruleta rusa.
Renate Yunge / Carolina Moure @yanosomospueblochico Frutillar